El inventario de existencias a final de año

INVENTARIO EXISTENCIAS

 

OBTENCIÓN DE EVIDENCIA DE AUDITORÍA DE LAS EXISTENCIAS A TRAVÉS DEL RECUENTO FÍSICO

Se acerca el cierre económico para la mayoría de las entidades mercantiles y llega el momento de realizar una de las pruebas más comunes dentro del área de existencias: el inventario o recuento físico.

Las existencias son, entre otras, una de las partidas más afectadas por fraudes contables. En caso de querer obtener más beneficio, las entidades pueden elevar ficticiamente el precio unitario de las existencias o inventarse unidades físicas de existencias. En caso contrario, ocultarán unidades físicas de existencias o reducirán ficticiamente el precio unitario de las mismas. Es por ello que, el auditor, debe obtener evidencia de auditoría suficiente y adecuada con respecto a su realidad y estado mediante:

  1. Su presencia en el recuento físico de las existencias para evaluar las instrucciones y los procedimientos de la dirección en cuanto al inventario de existencias, permitirle observar la aplicación de los procedimientos de recuento de la dirección, inspeccionar las existencias y realizar pruebas de recuento.
  2. Aplicar procedimientos de auditoría a los registros finales de existencias de la entidad con el fin de determinar si reflejan con exactitud los resultados del recuento realizado.

La presencia en el recuento físico sirve al auditor para determinar la realidad de las existencias y evaluar su estado, así como realizar pruebas de recuento. También le permite al auditor observar si se cumplen las instrucciones de la dirección y si estas directrices son fiables, proporcionándole una idea acerca del control interno.

Para la realización de las pruebas de recuento, el auditor parte de los registros de recuento de existencias llevado a cabo por la entidad. En base a este inventario, se selecciona una muestra y se verifica su integridad y exactitud contando nuevamente cada uno de los elementos seleccionadas. También se pueden seleccionar elementos al azar de físico a inventario.

Lo ideal es realizar este proceso el mismo día de cierre de los estados financieros (normalmente el 31 de diciembre de cada año). No obstante, por razones prácticas, esto puede no ser así. En tal caso, se deberán diseñar procedimientos de auditoría para obtener evidencia sobre si se han registrado correctamente las variaciones de las cantidades de existencias entre la fecha del recuento y la fecha de los registros de existencias.

En caso de que no sea factible realizar el recuento físico de existencias, como, por ejemplo, en el primer año de auditoría, donde no podemos obtener evidencia de las existencias registradas en balance el año anterior, el auditor deberá expresar en el informe de auditoría una opinión modificada (con salvedades) como consecuencia de la limitación al alcance.

Por último, puede darse el caso de que una entidad tenga existencias custodiadas y controladas por un tercero, en cuyo caso será necesaria la realización de confirmaciones por terceros.

Andrea Laborda

Departamento de Auditoria en ARL AUDITORES, S.L.P.